Las chicas de Bake the World han elegido la receta ideal para celebrar el éxito de su iniciativa y la gran acogida que ha tenido en la blogosfera. Estos bollos suecos son dignos de celebración y no pueden ser más fáciles de preparar y más ricos.
Estamos en cuaresma, todavía quedan 19 días para que finalice, y este dulce es propio de este período en Suecia, Finlandia y Estonia. Aunque durante mucho tiempo la tradición original era comerlo como última comida festiva el lunes y martes de carnaval, víspera del miércoles de ceniza, fecha en la que comienza la cuaresma. Ahora lo venden en comercios desde Navidad hasta Semana Santa y se saborea como postre todos los martes desde el martes de carnaval hasta el de Pascua. El primer martes que se consume se conoce como el martes graso en Suecia o Fettisdagen.
Este dulce, semla, o estos dulces, semlor son panes aromatizados con cardamomo rellenos de nata, pasta de almendra y cubiertos de azúcar en polvo que tradicionalmente se comen bañados en su base con leche tibia, ritual que denominan hetvägg. Todo un manjar que se puede mejorar como hacen en Finlandia donde sustituyen la pasta de almendras por mermelada de frambuesa.
Cuenta la historia que el Rey Adolfo Federico de Suecia falleció después de haber ingerido catorce raciones de hetvägg como postre en una cena en la que no había tenido suficiente con langosta, caviar, chucrut, sopa de repollo, ciervo ahumado y champán. Ese mismo febrero, mes en el que murió fue bautizado como el «Rey que comió hasta morir» y así se estudia en las escuelas.
Mi recomendación es que preparéis esta receta, la rellenéis de nata y probéis con toda clase de rellenos que os gusten: chocolate, mermelada, crema pastelera… porque cualquiera de ellos os va a encantar.
Ingredientes para los semlor:
- 450 g harina de fuerza
- 180-200 g leche
- 70 g azúcar blanco
- 1 huevo mediano
- 50 g mantequilla
- 12 g de levadura fresca
- 5 g de sal
- 1 cda. de postre de cardamomo recién molido
Ingredientes relleno:
- 125 g almendra molida
- 100 g azúcar blanco
- 50-65 g leche entera
- huevo para pincelar
- azúcar en polvo para decorar ypara montar la nata
- 200 g de nata montada
Preparación:
Comenzamos con el relleno de pasta de almendra. Para ello disolvemos el azúcar en la leche y lo mezclamos con la almendra molida, lo trabajamos hasta obtener una pasta y reservamos.
Seguimos con la preparación de la masa. Calentamos la leche y derretimos en ella la mantequilla y cuando esté tibia añadimos el resto de ingredientes excepto la sal que añadiremos al final para que no reste efectos a la levadura. Debemos amasar la mezcla durante diez minutos para dejarla lisa y brillante.
La ponemos en un bol y la tapamos hasta que doble su volumen, aproximadamente unas tres horas. Pasado este tiempo hacemos bolas de 50 g y las ponemos sobre una bandeja cubierta de papel sulfurado con una distancia entre ellas de 5 cm. Déjalas reposar durante dos horas tapadas y en un lugar alejado de corrientes.
Pasado este tiempo, pincélalas con huevo batido y hornéalas durante 8 minutos a 200 ºC. Retíralas y déjalas enfriar sobre una rejilla.
Entre tanto montamos 200 g de nata para postres con azúcar glas al gusto y ayudándonos de un batidor eléctrico de varillas.
Una vez que los bollos estén fríos los cortamos por la parte superior como si levantáramos un sombrero y los rellenamos con la pasta de almendras y la nata montada. Espolvoreamos con azúcar glas y saboreamos.
Tengo mis dudas sobre si alguien sería capaz de comerse catorce delicias de estas seguidas como postre, pero os aseguro que más de una caen.
Bon appétit!
Noelia, qué chulos te han quedado, nosotras que no habíamos oído hablar de estos bollos nos han parecido fabulosos, vamos que si no fuera porque son algo calóricos, los desayunábamos mañana otra vez!!
un abrazo
Gracias chicas!
A mí también me han encantado y para restarle calorías los rellené con pavo y un poco de queso bajo en grasas, están de vicio!!!
Un abrazo.
¡Qué ricos! Te han quedado perfectos.
Gracias Cósima!
Un beso!
Hago esta receta en casa y te aseguro que no llegan a la noche jajajajjaa
Bsss
jajaja, no llegan! Aunque en la receta original se preparan bollos de 100 g yo los preparé de 50 g para que quedaran más pequeños, pero no importa, se come uno tras otro 😉
Besos.
No me extraña que se comiera «tropecientos» y no me extraña que la palmara jajaja… la verdad es que están tan ricos que no hay quien se resista!!
Para la próxima te haré caso con los rellenos, he visto muchos por ahí y creo que están deliciosos también ,de hecho seguro que los haré mas pequeños y variados, tipo bocado de nata uuummmm ya me relamo.
Besos
Nieves
Sí nieves, tuve que releer lo de las 14 raciones, no daba crédito a semejante cantidad, aunque entiendo que si era un glotón estos bollos se le hicieran irresistibles.
Besos!
Que cosa más buena, los voy a poner en marcha pero ya, me temo que en mi cassa van a encantar.
Ya me contarás que tal el resultado. Pero seguro que triunfan.
Un saludo.
¡Hola! Primero quiero agradecerte tu visita y segundo felicitarte por estos semlor tienen una pintaza tremenda. No me extraña que ese señor en cuestión se pusiera morado porque es difícil tomar solo uno. Besos.
Gracias Pilar por pasarte por aquí también! 🙂
La verdad es que son viciosos y cuesta no comer más de uno, dos o tres, ¿pero catorce?, jajaja. Yo no podría.
Besos.
Hola Noelia! no comprendo como se pudo comer 14, están ricos, muy ricos, pero son densos. Para mi son ideales para comerlos solos o con leche pero a media mañana o a media tarde, sin comer nada más. No creo que sean un postre «ligerito», pero bueno, para gustos los colores y siempre hay alguien que puede… Los tuyos tienen una pinta estupenda y las fotos te han salido preciosas.
Hola Magdalena!
Pues sí, yo tampoco me veo comiendo semejante cantidad, además creo que se saborean mejor como tú dices, a media mañana o para merendar y no como postre.
Gracias!
Besos.
Están estupendos!
Gracias! 😉
Que preciosidad de fotos y que perfección de bollitos!!! .Ha sido un placer preparar Semlor. Me guardé 3 en el congelador y espero al finde para tomarlos bañados en un plato con leche como se acostumbra… Menudo festival!!! Nos encontramos en el próximo reto panarra.. Besoss,
Sí Joaquina, yo también guardé alguno en el congelador para el fin de semana. Solo pensar en lo bueno que está me cuesta no sacarlo antes del congelador, jajaja.
Nos vemos 😉
Besos.
Te han quedado fabulosos, Noelia.
A mi me encantan con el relleno de mazapán y nata, un poco contundente pero me sabe delicioso, ¡ah! y mojado en leche 😉
Te aseguro que con uno ya tengo bastante, no podría con más. No sé como alguien puede comer 14!!!!!! Y encima después de una cena. Pues eso, para morirte…
Un besito
Gracias Olga!
Es una bomba calórica digna de romper cualquier dieta, jajaja. La verdad es que es un placer llevar una cucharada bañada en leche al paladar. Todo un festín 🙂
Besos.
La verdad es que han sido todo un descubrimiento, están buenísimos y te han quedado fenomenal.
Besitos
Totalmente Sara!
Gracias!
Besos.
Te han quedado perfectos, vaya fotos bonitas y tienes razón, habrá que probarlos con otros rellenos que merecen la pena estos bollitos.
Saludos panarras.
Gracias Jose.
El último que me quedaba lo probé con nutella y la combinación está buenísima.
Saludos.
Como para decirle que no a estos bollitos Noelia!
No sé si podré con 14 de golpe, pero que te hago desaparecer unos cuantos eso te lo aseguro!! 😉 Tienen una pinta deliciosa!!
Un beso!
Jajaja, pues te invito encantada 😉
Besos.
Te han quedado unas fotos realmente bonitas… nada que supere el aroma a cardamomo, el sabor de la nata… uf! Comer uno de estos empapado en leche ha sido toda una experiencia…
El aroma a cardamomo es lo mejor;) Me gusta cuando lo estoy preparando pero cuando pruebo el resultado es increíble. A veces infusiono un vaso de leche con cardamomo y mojo un trozo de bizcocho normal… creo que es aditivo, jajaja.
Besos.