Cuando era pequeña me encantaba salir al campo a buscar moras silvestres, llegaba a casa acompaña de mi abuelo con cubos de moras con los que luego hacíamos mermeladas o simplemente comíamos como si fueran palomitas…

Con el tiempo, esta baya fue cambiando de tamaño, no es que haya encogido mucho pero ya no tiene aquel grosor de antaño, tampoco el mismo sabor pero conserva ese olor a fruta fresca que despierta los sentidos.

Recordando viejos tiempos, salí en busca de moras por los mismos lugares que iba cuando era una niña y llegué a casa con un buen puñado de ellas que hicieron las delicias de varios desayunos en formato mermelada y muffins.

La receta que escogí para preparar los muffins es la que William Sonoma ideó expresamente para esta fruta. Es rápida de hacer pero un poco más laboriosa que la de un muffin convencional, pero creedme, merece la pena seguirla a raja tabla porque el resultado de sabores es una combinación equilibrada y perfecta. Este muffin está coronado con un crumble que hace que en cada bocado se aprecie la esponjosidad del relleno con el crujiente de la corteza.

Los ingredientes que vamos a necesitar para la cobertura son:

    • 90 gr. de azúcar
    • 45 gr. harina
    • ralladura de medio limón
    • 30 gr. de mantequilla desmenuzada
    • 45 gr. de pacanas en polvo o troceadas finamente

    Para la masa de muffin:

      • 315 gr. de harina
      • 185 gr. de azúcar
      • 10 gr. de levadura en polvo
      • 5 gr. de bicarbonato sódico
      • 5 gr. de canela en polvo
      • ralladura de medio limón
      • 1 pizca de sal
      • 1 huevo grande
      • 75 gr. de mantequilla derretida
      • 250 ml. de buttermilk *
      • 250 gr. de moras frescas

      Preparación:

      Precalentamos el horno a 190º C, engrasamos y enharinamos 12 moldes metálicos para muffins o una bandeja de horno. Si utilizamos cápsulas de papel para horneado no es necesario este paso.

      Comenzamos con el preparado para la corteza crujiente. En un bol pequeño mezclamos el azúcar, harina y la ralladura. Añadimos mantequilla desmenuzada, las pacanas y mezclamos hasta conseguir una consistencia uniforme. Reservamos.

      En otro bol preparamos la masa para los muffin. Mezclamos la harina, previamente tamizada, azúcar, sal, levadura, bicarbonato, canela y la ralladura de limón. Una vez mezclado, añadimos el huevo, la mantequilla y el buttermilk. Mezclamos hasta que esté humedecido, quedará ligeramente grumosa.muffin_mora2

      Con ayuda de una espátula añadimos las moras con cuidado de no romperlas. Vertemos la mezcla en cada cápsula o cavidad de la bandeja y repartimos por encima la mezcla para la corteza que habíamos reservado.

      Horneamos de 25 a 30 minutos a 190 ºC. En mi caso estaban listos en 25 minutos, dependiendo de cada horno puede variar un poco el tiempo de cocción. Para comprobar si están es su punto pinchamos con un palillo el centro de cada muffin hasta el fondo y si éste sale limpio el muffin está listo.

      Al sacarlos del horno los pasamos a una rejilla donde dejamos que se enfríen completamente. Pasado este tiempo están listos para comer.

      Buttermilk * : Para preparar butterlmilk ponemos 200 ml. de leche y 50 ml. de zumo de limón en un cuenco durante diez minutos. Pasado este tiempo, revolvemos bien con un tenedor y añadimos a la receta en la fase que nos indique.

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      Estos muffin de moras están exquisitos por sí solo pero los amantes de las moras pueden acompañarlos con mermelada para intensificar su sabor.

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      Ingredientes para la mermelada de moras:

        • 500 gr. de moras
        • 225 gr. de azúcar
        • 15 ml. de jarabe de arce

        Preparación:

        Lavamos las moras, escurrimos y pasamos a una olla pequeña. Añadimos el azúcar y jarabe de arce y dejamos macerar todo durante un mínimo de seis horas y un máximo de 12. Pasado este tiempo, llevamos la olla a fuego lento durante 30 minutos o hasta alcanzar el espesor deseado.

        Personalmente, me gustan las mermeladas con trozos de fruta por lo que remuevo la mezcla con suavidad para no ablandar las moras.

        Bon appétit!

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